lunes, 25 de abril de 2011

Veladas sencillas


A veces nos juntamos, tres o cuatro familias, en la casa de alguna, y nos comemos algo simple, un asado o unas pizzas, unas empanadas. Tomamos vinos de medio pelo, que en Argentina son de un excelente sabor. Después, escuchamos unas musiquitas.
Nunca sucede nada extraordinario. Yo me pongo re-chulo, una camisa fina, un pantalón de vestir y zapatitos, y ya estoy cachondo por la tarde, mientras hago abdominales, porque pienso que quizá, entre tanta pacatería, fluya alguna charla picante, o en la profunda noche, allá, cuando las lentas canciones ochentosas suenan, y movidos todos, por la efervecencia del alcohol y el humo, se desatará, como un tornado inesperado, una apoteótica orgía o una divina sesión swinger.
Pero vivo en la ficción.
Después de comer, porque mientras se come nadie habla, las mujeres se ponen a elogiar a sus hijos, los hombres hablan de sus autos. A veces, hablan de sus perros, o de sus gatos, y de sus incomparables virtudes.
Cuando digo que hablan de sus hijos, de sus autos o de sus animales, digo que hacen eso, de una forma ostentosa, irritante, babosa. Hablan todos juntos, cada cual de lo suyo, hablan, no se escuchan. Hablan, como si ellos fueran la "cosa" de la que hablan, se jactan, se regodean, podría hasta sospechar que tienen orgasmos espontáneos, cuando dicen: "Rocío caminó a los nueve meses!!!", o "el GPS que me compré lleva música de fondo", o "qué inteligente es mi perro, yo le muestro el cinto y ya sabe que tiene que entrar!!!".
Y así se van las horas,  la noche, como una orgía, pero de repugnante egos en decadencia, ya que nadie es por lo que es, sino por su extensión, ya sea hijo, auto o gato.
Yo puedo permanecer en silencio o asentir lo que otro me cuenta, como sí, lo que me cuenta significase el destino del mundo, un hecho crucial. O tal vez, porque entiendo que en ese instante, el orador se está derramando de placer.

Imagen: Jules Grün

41 comentarios:

Jesús Galbraith dijo...

es lo que tiene no encajar en el puzzle

Rob K dijo...

Mientras siga habiendo buen vino, déjelos nomás hablar...

vera eikon dijo...

Hoy en día ya no se conversa, simplemente la gente se pone medallas....Y claro lo que prometía ser una orgía, acaba por convertirse en una sucesión de ejercicios de onanismo.De todos los casos el que me resulta más difícil de "aturar" es el de los hombres que hablan de sus autos...ya me resulta suficiente con aguantarlos en el trabajo. Pero estas situaciones me llevan a preguntarme si a alguna gente le interesa realmente el "otro", o simplemente lo valora como un espejo en donde proyectar su ego (el colmo de estos casos es que se trata de un ego de rebote...)
En fin, me ha gustado este cambio de registro
Beso

Isabel dijo...

Directamente me ausentaria por siempre de esas "veladas" para nada provechosas y que nos chupan tanta energia de la buena que tenemos...
De echo he pasado por eso, he cortado con esas "juntas" y fui tildada de diferentes cosas, las cuales no me importan! me reuno con gente con la que si quiero cultivar vinculos, con las que pueda hablar cosas que me llenen el alma o por lo menos me hagan reir a carcajadas.

Interesante post! un beso.

Asolada dijo...

Joder, qué horror, ¿no? Y encima hay que intentar poner buena cara y sonreír, porque si no, seguro que te dicen que si todos están de acuerdo, será porque lo más probable es que tú estés contra el mundo y no al revés.

Lo que yo te diga, querido. Manda huevos.

Un beso

◊ dissident ◊ dijo...

Lo describes tan bien que por un momento he sentid asco de mí mismo, porque supongo que antes, cuando también compartía ese tipo de veladas, haría lo mismo, aunque también he interpretado el papel que adoptas tú muchas veces. Supongo que por ese tipo de cosas es por las que mi "vida social" está muerta.

Reflexiones...

Crista de Arco dijo...

Paso ese tipo de reuniones...
Puedo llegar a ser muy muy mala en ellas...

Un beso o 2 ***

Pd: me podes decir qué le pasó a Racing??? Me habían hecho ilusionar tanto... :(

MAR dijo...

Amigo:
Lo viví, lo odie y muchas veces caí en el puto juego (disculpa el garabato), que en vez de preguntarme cómo me iba, me preguntaban en que colegio tenía a mis hijas, si era británico, cuàntos metros tenía mi casa contruídos y de terreno, etc, etc, etc, ME ABURRIO TODO, ahora que he desmalezado mi jardín interior sólo he dejado personas con gran terreno en su corazón y por sobre todas las cosas sencillez.
Mi abrazo para ti.
Muy buen post, todo un fenomeno social.
mar

mariajesusparadela dijo...

Nunca he ido a comidas de esas. Espero no tener que ir nunca.

Carmela dijo...

¿por qué no organizamos una velada?
Prohibido hablar de coches, metros cuadrados de casa, hijos, coles y pamplinas varias.
Y ponte guapo!!
besos

Marián dijo...

Esos momentos son los más propicios para hacer una abstracción y contemplar al ser humano en su completa estulticia...¿Y no es menos cierto que estos momentos nos hacen sentirnos superiores al resto?...Piénselo, caballero...

dulce dijo...

te invito a una de las mias, vinito del bueno, comidita muy rica y despues el postre, ahi vos elegis que probar y te aseguró que hay de todo.

minerva dijo...

No es tan malo a fin de cuentas....así tienes material para escribir ;)

Un beso.

Noelia Palma dijo...

normal que hablemos y no escuchemos... no?

pero la cosa va mas allá de eso, entiendo como lo percibís, como una especie de orgía propia quizás?

en fin, estás narrando y realmente te queda excelente, tenés literatura para rato, querido!

te abrazo

leamsi dijo...

estoy con Rob, mientras quede vino...lo triste es que sus vidas sean tan vacias que tengan que llenarlas con los extras de sus coches, con lo caros que resultan los colegios de sus hijos o con lo bien amaestrados que están sus perros...
pero después de esto, me surge una duda ¿compartís generación (edad) o solo barrio? porque me dá la sensación de que no encajas en ese clan de "carcas"
salu2

Elena dijo...

"la cosa"... Lacan en estado puro.
Al carajo con la gente aburrida.
Al carajo.

Alelí dijo...

y si, a mi me aturde un poco, uno de estos días solté "ché hablen de a uno por vez" claro no me escucharon...y ahí me quedé, testigo silencioso del desencuentro social!

agggggggggggggggggggg

VeroniKa dijo...

A mi me encantan esas reuniones porque pienso en la vida paralela que tienen todos, me los imagino solos en sus habitacione spensando en los amores que no tuvieron, en los amantes que se perdieron, en lo que se han convertido, en lo arrepentidos que están, en las mentiras que se han dicho y en la orgía de caricias desperdiciadas que nunca se dieron....

y mi ficción es igual que la tuya, por si acaso nunca me invites a un asado :P

besos

soylauraO dijo...

Todo un cabalero. ¿Esas cosas se hacen por un vino argentino????
http://enfugayremolino.blogspot.com/

Nina dijo...

¡Qué temita esas reuniones!
Generalmente me mantengo al margen, me aíslo de aquellos que hablan banalidades o tienen comentarios bien fachos, y me agrupo con aquellos que buscan pasar un momentos agradable, con amigos/familia disfrutando un buen vino, una buena comida y una linda charla.

¡¡Besote y muy buena semana!!

EG dijo...

Mi vida social esta "muerta" como la de Dissortat, pero por motus propio. Me aburro en todos lados, y he llegado a ese punto del que habla Vera, un egoísmo tal que no me interesa mucho el otro, ese otro común-básico-mercante. Me atrapan los border line, como todos ustedes.

mujerdeole dijo...

Y todo se vuelve realmente insoportable cuando se empieza a hablar de los colegios de los niños. Ahí sí que es necesario contar con sendas dosis de alcohol y drogas varias.

Mejor pasemos a las veladas complicadas, que estas sencillas me tienen harta.

Abrazo

Errata y errata dijo...

Mirá, no sé...entré tres veces. No sé qué decirte porque yo hablo de mis niños y mi gata y mi GPS (que es mi marido), de mi auto no porque lo reventé hace dos años y desde entonces no tengo auto propio. ¿Será por eso que me aburro tanto? debería alejarme de mi misma por un tiempo. Felises pajcuas atrasadas!

silvia zappia dijo...

de éso precisamente hablábamos en la "velada del sábado" con marido y amigos: ahora parece que la felicidad pasa por tener un perro y hablar de él, por tener un gps y hablar de él, de los hijos, los partos, los nietos (bah, este es un tema inmortal)...y nosotros, sapos de otro pozo...hacemos orgías de comida, charlas que al resto del mundo harían salir huyendo ( o nos llevarían al manicomio, o...bueno, no quiero decir que nos denunciarían...)
cuando quieras, traete una stellita y sumate.

besos*

(cuando arrancaste, me hiciste pensar en Tomatis de Saer...después ya la velada fue muy sencilla...)

y estaba aquí pensando...deberíamos invitar a paradelita, qué tal?!

un beso*

Vivo con Hades a tiempo parcial dijo...

¿Y si buscas otros rinconces, otras audiencias, otros cerebros despistados de lo mundano que se entretengan, en, que se yo, el universo en equilibrio o las turgencias bajo las sedas...?

Anónimo dijo...

Pero Curiyú esta parece reunión familiar, o mejor dicho "costumbres argentinas",jajaja.Te pasasteeeeeee, realmente relatando eres GENIAL.
Besote

HUMO dijo...

Me encantó! Son las trivialidades, las charlas vanales entre pares que nos pintan de cuerpo entero como miserables humanos, pobre de nosotros, nos contentamos con tan poco...Pero bueno, tampoco da para andar filosofando un asado al mediodía jajajajajajaj, eso de la orgía, que mente mas sucia, me sentiré desnuda la próxima fiesta, oh my god!


Besote!

=) HUMO

Lucía dijo...

Joé, con lo que prometía la noche... ¿Quién prefiere hablar del gps o de su hijo antes que marcarse un swing? Jeje.

Besos

Mercedes Thepinkant dijo...

Pero con qué clase de gente se junta usted? Eso no se debería permitir. La obscenidad y degeneración de esas mentes me parece totalmente abobinable. Y eso ¿lo hacen delante de sus hijos????? Arderán en el fuego eterno!! Cambie usted de amistades inmediatamente.Puede resultar maléficamente contagioso. Le sugiero una velada de chacrka puja. Busque gente afín y no volverá a sentir nunca más que vive en la ficción.
Besos

Maga h dijo...

Será cuestión de que no nos salgamos de la ficción, no?
Parece que afuera no hay que cosa nos tiente.

Besos ficcionados!

Malena dijo...

Estuve ahí, en esas veladas paquetas donde lo más interesante que contaban las esposas de los amigos de mi ex poso era el olor a la cacona del bebé, mientras ellos estaban reunidos alrededor de la parrilla, adorando a un pedazo de carne y hablando de las bondades de la tecnología celular.

¡¡Gracias a Dios por el vino!!

Carla dijo...

aburrido... por qué seguís yendo? :/

marichuy dijo...

Pensé que nomás acá abundaban ese tipo de reuniones. No quedará más que disfrutar de las empanadas y el vino.

Abrazo

guille dijo...

Yo soy asocial. No voy.

Se puede contar mas a gritos o con mas palabras, pero no mejor.

¿Que vida mas plana ¡eh!? ¿Cual sera su aspiración para el dia siguiente' ¿Qué el perro entre en casa haciendo el pino?

El detalle del cinto; total

Isabel Martínez Barquero dijo...

Uf, una representación del yo en sociedad, pero del peor "yo". Terrible teatro donde todo es algarabía que nadie escucha y sólo se ven gestos y se perciben las cadencias del orgullo en las voces...
Espero que hayas salido indemne de esa reunión. Bueno, has salido cuerdo y este texto lo confirma.
Beso directo sin GPS.

Anónimo dijo...

A veces toca ir a estos eventos... yo para fastidiar me invento cosas..(seguro que los demás también jajaja...)mejor no tomarselas muy enserio y disfrutar del vino o las copas como anestesia...

PD: sólo me voy del blog...Abismo seguirá leyendoos, acompañandoos y disfrutando con vosotros ;D

Besos abisales

virgi dijo...

Genial haberme decidido a visitarte.
Aproveché que estabas de almuerzo en otro sitio y he remirado tus rincones.
Me gustaron. Mucho.
Volveré (no me hace falta el GPS), besos.

La abuela frescotona dijo...

es una típica juntada entre familiares y amigos, y ese es el lugar de sus descargas emocionales, es algo así, como una terapia de grupo, despues de la comilona, estan todos liberados de sus egos, y la fiestita se animará, lástima tus fantasias insatisfechas jajaja
Curi me agarró la gripe, casi parto, pero estoy saliendo, te abrazo amigo mio

Marga dijo...

Uff reconozco esas reuniones, por acá también se dan... afortunadamente llegué a esa edad en las que una las manda al guano con todo cordialidad y con salero. Mis reuniones ahora son más entrañables y divertidas, sólo asisto a las de mis locos desubicados, como yo. Aunque lo del vino no haya cambiado, eso sí... jeje.

Besote!

ROSA ALIAGA dijo...

Me ha hecho reír el comentario que has puesto en mi blog y me he reído mucho más al leer tu texto. No tengo hijos y no puedo presumir del coche. ¿Por dónde me extiendo?

MONDO FRANKO dijo...

Si si exquisita descripción yo estuve ahi también, incluso esto me ha llevado a huir por las calles solo en año nuevo hablando con extraños para no tener que soportarlo. Lo he preferido
Abrazo