sábado, 4 de febrero de 2017

12


Me demoro en mis amores
me acomodo en cápsula sellada
y atravieso constelaciones
sustraído del mundo
de las guerras
de sus opacidades
mis pequeños amores eternos
que caben
en una mano
nutriéndome
con láminas de piel
pulpa de labios
si tengo sed, saliva. 

9 comentarios:

P MPilaR dijo...

los amores eternos. Los que caben en una mano y se nutren de la hermosa pequeñez
que no cesa***


bss

Horacio dijo...

Así es. Abroquelarse en quienes queremos en esta época patética, de mentirosos y xenófobos.

Abrazo grande

Madrilenials dijo...

Llevo mucho tiempo leyéndote. Y, aunque no comente, siempre vuelvo.
Siempre consigues transmitirme algo creíble.

Un abrazo!
P.

Licantropunk dijo...

Pequeñas tretas para continuar en la brecha.
Saludos.

Amapola Azzul dijo...

Las guerras hay que dejarlas afuera siempre.

Besos.

Acuarela dijo...

Y muchas veces basta con la saliva

Gabriela dijo...

amor para saciar la sed,
beberse.

Amapola Azzul dijo...

Este poema es precioso.

begusa dijo...


Si tienes sed,
entre entre unas piernas.